DISFRUTAD MI OSADÍA

Tras la Brújula y con todos los recursos aprendidos, regresamos al mundo de los viajes. Dejamos a parte ese libro con vida propia, y recuperamos el espíritu que en él se describe, dejarse llevar. Volvemos a la escritura de las sensaciones que te llegan de un país. Lo hago casi por imperativo, es necesario escribir esto, aunque ya no tanto con la necesidad de querer compartirlo, en esta ocasión mas con la necesidad propia de querer albergar el recuerdo. Ahora Japón, un viaje inesperado, que aún no había aparecido en la lista de sueños, pero bueno, no obtendrá una negativa. Japón, desde siempre, un mundo alternativo, otro planeta. Tradiciones y comidas que tantas veces ha ilustrado la televisión y en los dibujos. Esas ganas de vivir experiencias al estilo aníme (dibujos japoneses). Mitos de gueisas y samuráis, de ceremonias del té y comer sushi. Guardo en mi interior emociones que no tenía antes de la vuelta al mundo. Sería complicado explicar, que las expectativas han

Regresar con los anhelos de un mundo antiguo, un modo mágico de ver la vida, la historia. Grecia, es ese país que hoy en día, te aporta a la memoria, todos esos cuentos que nos fueron relatando de  jóvenes , mitad ficción, mitad real. Aquellas leyendas que en gran parte, he ido incorporando a este blog. Más allá de Atenas, la convulsionante y caótica capital, del país de Europa, económicamente más afectado por la crisis. Donde aguardan la mítica Acrópolis, pero poco mas, y ciudad de la cual no mucha gente habla generosamente. Las Islas Griegas es ese atractivo emergente que trataremos de descubrir. Sin buscar las Ítacas, o tal vez si ¿quién sabe?. Allá donde emergieron todos los males del mundo, a causa de Pandora, aquella muchacha que abrió su caja, dejando en su interior la esperanza. Donde Dédalo construyó las alas para él y para su hijo, Ícaro, para escapar de la isla de Creta… y tantos otros mitos y leyendas por nombrar. Sin pretender especular en exces

Partir de nuevo, pequeña aventura o sueñito adicional. Cruzar el Estrecho de Gibraltar, solo eso ya causa miles de sensaciones contrariadas, por ello soy afortunado, pero cuantos sueños rotos y vidas enteras se han quedado en este sendero mísero que separa esperanzas de desesperados. Sobre Marruecos, un sueñito egoísta, es la puntita de África, y mi último continente por visitar, el quinto en un mismo año, aquel por el que alguna efímera vez soñamos con llegar. No se que espero de este destino, supongo que espero que me sorprenda, es lo que pasa cuando no esperas nada. Del misticismo de los paises musulmanes que nunca sabes que te depararan.  De aquellos que reniegan de las libertad de un pueblo que vive en su interiror, de los hombres y mujeres libres del desierto del Sahara, esta parte "suya" mejor no la visitaré. Me dejaré llevar por la calma de un pueblo, por la comida tradicional del norte de África y donde el té, las especias y los aromas recuerdan a las mi

La intención es visitar poco la tierra de los gringos, aunque poco no sea digno y casi un insulto llamar a Hawai y California. Y nunca se sabe, las intenciones a veces son tan solo eso, intenciones. De la pequeña isla que decir, pocas islas albergan tantos sueños historia y acontecimientos históricos como ella. Desde la bahía de Pearl Harbour y una mañana histórica, el primer concierto televisado de la historia, fue visto por mas de 1500 millones de personas en todo el mundo en su Aloha from Hawaii subido en un escenario "el rey" Elvis Presley, además la isla tenga posiblemente la playa mas famosa del mundo, Waikiki en Honolulu, cuantos sueños han tenido millones de personas acerca de estas.  En la parte de tierra en los poderosos Estados Unidos, ver Los Ángeles y quien sabe si un partido de uno de los equipos de baloncesto mas famosos del mundo, o tal vez un poco mas lejos Hollywood la gran fabrica del cine, el paseo de la fama, en fin, tras escribir est

La vuelta de la ilusión, vislumbrando horizontes, una dirección en concreto, un camino o mas bien una dirección, los caminos tienen veredas, atajos recovecos y senderos sin salida, pero la dirección, la dirección ahora se ha clareado, como se disipan las dudas que plegaban nuestra consciencia. Eso podría ser un resumen, el otro podría ser el de la Tierra media, eso es lo que representa Nueva Zelanda para mi, un mundo de fantasía  de ilusiones y de aventuras, anelando recorrer uno de los países con los paisajes mas bellos del mundo, entrar siendo un viajero esperando ser convertido en un hobbit o un elfo. Mas allá de lo que la imaginación pueda desarrollar, Nueva Zelanda representa a diferencia de Australia, estar a la otra punta del planeta, concretamente Valencia cae en el mar cerca de la costa, si cavara un túnel que travesara el centro de la Tierra, probablemente acabaría en Madrid o mas bien y mejor, cerca del linde de regiones de lenguajes que combinan aragonés 

En busca de un nuevo horizonte me dirijo a Australia, a estas alturas del partido y tras una trepidante e inolvidable Malasia, poco podría haberlo superado en Asia, y es seguro que hay cosas increíbles pero mi saturación en este momento es alta. Así que decido buscar en otros lares los pequeños pasos en este largo viaje hacia  mi Itaka personal. Australia en sí, es un icono importante en la vida de los que no viven allí claro, cuando piensas en lo mas lejos posible te sale Australia automáticamente, no muy lejos de la realidad aunque realmente sea Nueva Zelanda el punto opuesto a España en este mundo. Quizá no busque algo grandioso, he aprendido a que las pequeñas cosas o los pequeños detalles también, y en ocasiones mas aun, son muy  reconfortantes en los viajes, tal cual lo eran en la vida diaria allá en España. Aquí donde las grandes atracciones son la Gran Barrera de Coral, el gigantesco monolito sagrado de los aborígenes de Uluk, o la Opera de Sidney, ad

Indescriptible aunque trate de hacerlo, no tuve ninguna expectativa al entrar, pero allá donde solo conoces las Torres Petronas , un país adinerado que al entrar muestra su cara mas occidental, donde el shopping parece una cultura y las islas son accesibles por carreteras de cuatro carriles, es una autentica caja de sorpresas. Todo es solo una gran mascara, un país que guarda su tesoro mas preciado al margen mas posible de sus visitantes, regalos a la memoria a aquellos que se aventuran a visitar la vieja y recóndita zona de la vieja Malasia en Georgetown, Pennang , donde la vida en edificios coloniales te hace retroceder a otro tiempo, donde puedes pasar de una mezquita a un templo cantones y en frente puedes acceder a un templo hindú, por el camino un viejo cine donde pasan películas de Bollywood, mientras justo al lado un jurado escucha atentamente a cantantes chinos mostrándose en un recital publico, surrealista no, lo siguiente. Mas allá de la cosmopolita penínsul

Aquel país del que tanto se habla como imagen idílica de paraíso, donde todos dicen que vuelven encantados, parece que no andan desencaminadas las afirmaciones del país que parece a primera vista tener lo mejorcito de cada casa. Difícil es que no te guste un país del de la Asia del lejano oriente, y Tailandia parece que no es solo uno de esos sino que además se además se puede colar fácilmente en el pódium de los mejores o incluso perpetuarse en el top one por siempre. Aquí parece que los complejos de inferioridad de Asia desaparecen, la pobreza se esconde y muestra una nueva cara aun por descubrir, una cara amable con un descaro encantador esta tierra atrae con una inusitada familiaridad. Mucho por descubrir pero desde luego el exótico país de enigmático magnetismo seduce en las más amplias perspectivas, de una seductora cultura y cocina, con una vibrante vida en una capital acogedora, a la espera de unas playas de esas que materializan los sueños y tiñen de sentidos l

Olvida todo lo que has imaginado siempre, o bien recuerda lo que has pensado alguna vez y multiplícalo por diez, eso es lo que parece la India, un sin fin de sensaciones que te rodean, que algunas veces crees que no es para tanto como habías imaginado y otras tu boca solo puede decir “madre mía”. Un sin fin de historia reales que hacen que te sientas un privilegiado con la vida que te ha tocado. Empezando por la gente que es lo principal que tiene un país, existen miles de asombrosos ejemplos de un pueblo que lucha por sobrevivir, más allá de la mágica cultura o los antihigiénicos vicios, la sobredimensionada población india malvive bajo un caótico estatus normalizado, de pobreza congénita, exasperados dependientes, poco higiénicas costumbres y sus más que conocidos y reprochables acosos a las mujeres. Con todo ello se ha de seguir caminando, ellos en su histórica supervivencia y yo en mi viaje por conocerlos. No falta entusiasmo hay que decir, no son de ese pueblo que sonr

De un país que trasmite calma, solo se desea al visitarlo eso, un país desconocido y esperando que no muy transitado por viajeros. El reino de los cielos, que alberga las más altas montañas del planeta, 8 de los 10 picos más altos del mundo están aquí, precedidos por el gigante Everest en los brazos del Himalaya. Nepal es donde transitan los montañeros que desean tentar a la suerte a sus habilidades, también es un descanso en la mas ajetreada vecina India, un país que trasmite esa calma, de respirar aire fresco de no sentir el agobio del tiempo tras tus talones preguntándote la hora. De ciudades de colores y olores, una mezcla sutil y sincera entre china y la india, esperando encontrar la calma, y respuestas a preguntas que aun no la tienen, y preguntas que aun no me he planteado. Un descubrimiento seguro del desconocimiento de aquel que desconoce las posibilidades de un pueblo que guarda en las alturas. Tras dejar atrás la potencia avasalladora de China, y antes de llegar

Bueno allá vamos, al país del sol naciente, la ancestral China la milenaria Beijing, la muralla China, la titánica Hong Kong, tierra de tradiciones, mitologías, dichos populares y sabiduría china, no sé cuanto cabe en este subcontinente, pero desde luego las sensaciones son muchas, una carrera a caballo entre lo profundamente exótico y tradicional y una cruda realidad del país que crece desigualmente, pero como un tsunami económico. No quiero perder detalle en cada paso, pero desde luego sé que me perderé muchas cosas, básicamente porque es imposible en un mes, rastrear este gigante asiático. Lo vamos a intentar desde luego, hay que aprender también a saborear lo que se puede ver, pero a veces las prisas no nos dejan ver. El viaje más largo comienza con el primer paso, dijo Lao- Tsé y he aprendido recientemente que no solo es necesario darlos sino que se puede saborear cada paso, encuentras cosas muy interesantes cuando andas buscando no sabes que por el camino, en vez de dirig

Dublín, Irlanda del Norte , el lugar donde todo empieza, tratando de descubrir las sensaciones que este país o al menos esta ciudad me causan. Cuando viajas hacia aquí tienes la sensación de que todo va a ser verde, de que sus nativos van a ser todos de cabellos claros  y con los ojos azules y además cantarán y bailaran danzas irlandesas. El país del trébol  de las tascas irlandesas, de Saint Patrick y de duendes irlandés que esconden su vasija de oro al final del arco Iris. Bueno, pues el taxista que me recoge se llama Patrick , con lo que de momento empezamos bien, supongo que o hay muchos o voy a tener suerte. El taxi a la casa que está a las afueras, pero cerca del aeropuerto, cuesta 16 € , barato no va a ser Dublín. En la casa me espera Stephen , se da cuenta que mi inglés es nefasto, pero nos acabamos entendiendo. El y su mujer Emma viven con Sophie , su hija de un añito, todos ellos son rubios con los ojos azules, así que vamos recopilando bastantes tópicos. Stephen